Placenta previa (placenta que cubre el cuello del útero). Síntomas, causas y tratamientos de Placenta previa (placenta que cubre el cuello del útero)

En la placenta previa, la placenta cubre el cérvix (la zona por la que el bebé sale del útero). Normalmente, la placenta está colocada lejos del cérvix. La mayoría de las embarazadas que comienzan con placenta previa resuelven el problema sin tratamiento—el crecimiento del útero desplaza a la placenta lejos del cérvix. Con la placenta previa, pueden aparecer hemorragias de la placenta, lo que puede suponer una amenaza para el feto y para la madre. Este trastorno suele darse en las madres de mayor edad, en madres que han sufrido cesáreas previas, y en mujeres que han tenido partos múltiples.

Hemorragia vaginal indolora y repentina durante el embarazo, a veces sangrado vaginal intenso (suele darse cerca del final del segundo trimestre o al comienzo del tercero), calambres del útero, parto prematuro.

Monitorizar de cerca con pruebas repetidas pruebas de ultrasonidos, trasfusiones si se dieran hemorragias, y si fuera necesario, medicación para detener un parto prematuro. Puede realizarse una cesárea. A veces se recomienda reposo y descanso de la pelvis (evitación del sexo) en los casos de placenta previa.

Pruebas diagnósticas: Se realizará un examen físico y una revisión de la historia clínica. Una ecografía pélvica puede bastar para el diagnóstico de placenta previa. Pueden realizarse análisis de sangre si se hubiera sangrado vaginal. Pruebas: nivel de betagonadotropina coriónica, conteo sanguíneo completo (CBC) y ultrasonidos. Especialidades: ginecología y obstetricia.